Las orquídeas son una familia de plantas que se distinguen por las formas complejas que tienen sus hojas, y es que además de ser realmente bellas, cumplen una función muy importante en la polinización. Se dice que existen más de 25 mil especies pero la más común, y la que probablemente veas en las casas y tiendas, es la Phalaenopsis.
No es coincidencia que esta especie sea la más “común” ya que a pesar de su apariencia compleja, son realmente fáciles de cuidar. Para entender a tu Orquídea Phalenopsis es importante empezar por el origen, se trata de una especie de plantas tropicales que crecen en los troncos de los árboles.Abundan en estos lugares, no por los nutrientes del árbol en el que se hospedan, sino para poder alcanzar una mayor cantidad de luz y aire.
Otro dato importante de este tipo de orquídea, es que realizan la fotosíntesis a través de sus raíces, que suelen ser de un tono verde, y que necesitan estar expuestas a la luz.
Si bien puede ser que no puedas reproducir estas condiciones exactas en tu casa u oficina, si puedes darle un ambiente parecido para favorecer su crecimiento que se traduce en humedad alta, luz brillante, macetas o recipientes transparentes.
Se dice que las orquídeas representan la pureza, el amor y paz por lo que el que alguien te regale una de estas plantas es gesto de buenos deseos en hogar.
Maceta: |
4" |
Altura de la Planta: |
50 cms |
Las orquídeas no toleran en absoluto los encharcamientos y el exceso de agua, por lo que es importante que uses una maceta con buen drenaje y que solo le eches agua para mantener el sustrato húmedo.
Está es una planta que en su ambiente natural tiene sus raíces expuestas por lo que te recomendamos hacer el riego por inmersión. Tan solo sumerge ⅓ de la maceta dentro de un recipiente con agua y permite que sea la planta que obtenga el agua que necesita.
Utiliza un sustrato suelto y aireado para que las raíces puedan respirar libremente. Te recomendamos utilizar un sustrato especial para orquídeas.
Un punto clave para que tu Orquídea se desarrolle adecuadamente es la cantidad de luz que recibe. Colócala en un espacio con luz brillante pero no a sol directo. Un par de rayos de sol por la mañana o por la tarde pueden ayudar al crecimiento de la planta.
Es importante que la luz llegue a las raíces de tu orquídea, por lo que debes utilizar una maceta o un recipiente transparente o semitransparente.
Mantén a tu orquídea en un ambiente con buena humedad. Te recomendamos atomizar agua en sus hojas de vez en cuando para mantener una temperatura fresca y húmeda.
A las orquídeas les gustan las temperaturas de entre 18 y 25 grados centígrados, pero pueden sobrevivir sin problemas en temperaturas más altas siempre y cuando exista buena humedad.
Por ningún motivo permitas que tu planta esté expuesta a temperaturas menores a 13 grados centígrados o sufrirá. Esta no es una planta recomendada para exteriores o lugares muy fríos.